Cuatro millones de dosis contra la influenza o gripe aviar se están verificando en el país mediante protocolos establecidos por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) para garantizar la calidad e inocuidad del biológico.
A inicios de febrero del año en curso, el Subcomité Técnico de la Comisión Nacional de Avicultura recomendó el uso de vacunas contra esta enfermedad epidémica y como dice el boletín del Ministerio de Agricultura y Ganadería, una de las tres que respondió a la convocatoria abierta de compra e importación gestionó la traída del primer lote.
Otra importación del biológico fue autorizada a la empresa Boehringer Ingelheim del Ecuador CIA. LTDA. y llegará a Ecuador en las próximas semanas. En el comunicado no dice el tipo de vacuna que se va a utilizar.
Donde se vacunará contra la enfermedad infecciosa
Para garantizar la aplicación y uso óptimo del biológico, la Agencia de Regulación y control Fito y Zoosanitario (Agrocalidad) sigue los estándares de OMSA, y en esta primera fase se inmunizarán desde la próxima semana aves que están en el foco y peri foco de los brotes confirmados (Cotopaxi, Bolívar, Pichincha y Tungurahua), solo en granjas donde se cumplen con la implementación de medidas de bioseguridad, resultados negativos a pruebas diagnósticas y asista un médico veterinario responsable registrado en la Agencia.
En un trabajo coordinado entre la Agrocalidad y el proyecto PIATER de la Subsecretaría de Innovación del MAG, los avicultores reciben asistencia técnica, además, personal de ambas entidades levantan información detallada de cada predio, a fin de asegurar que se cumplan las medidas de bioseguridad.
La vacuna contra el virus alivia los síntomas que produce en el animal y es una herramienta que se complementa con las medidas de bioseguridad; es biológicamente segura por lo que no constituye un riesgo para los humanos. Disminuye la tasa de mortalidad del 80% al 40% o menos, sin embargo, no evita el contagio a otras granjas.
El Gobierno Nacional ratifica su compromiso para trabajar junto al sector avícola del país y precautelar el abastecimiento de huevos, carne de pollo y pavo, que son proteínas de alta importancia en la dieta diaria de los ecuatorianos.